domingo, 5 de junio de 2011

Lluvia

Uff... Siento que hace millones de años no escribía en mi blog. No es para menos, ya que llevo más de un mes sin manifestarme en él y, para ser sinceros, mi última entrada no fue la con mayor contenido literario de la vida, aunque, según un amigo, es "artística" jajaja.

Después de tanto tiempo, he pensado muchas veces "oh, esto lo tengo que escribir en mi blog" o "mi próxima entrada va a empezar así", entre otros, pero la verdad es que nunca me doy el tiempo para ello y es una lástima, ya que la catarsis que me provoca escribir aquí es cuatica.

Siento como las gotas de lluvia golpean mi ventana y me encanta, pero no puedo sentir nostalgia al recordar el sonido de ellas en mi casa de Santa Cruz, donde se sentía su golpeteo en cada rincón, a veces con furia, otras con calma. El viento las acompañaba de vez en cuando, haciendo que los árboles se inclinaran bajo su inmensa fuerza. Pero aquí estoy, en Santiago, en mi departamento, escuchando un poco de ese gran espectáculo sonoro que apreciaba en totalidad en mi querido Santa Cruz. Pero ¿saben qué? A pesar de todo sigue siendo lluvia y desde que tengo memoria la he amado. Es parte de esa conexión que tengo con el agua, de esa que me encanta y que me llena, que no tiene explicación lógica para mi, solo la siento.

Hoy baje a comprar y al llegar a la calle no pude evitar sonreír por notar la lluvia helada sobre mi cara, sonreír por sentirla, porque estuviera. Llegue de buen humor al Ekono, tanto así que le dí propina al empacador jajaja (aunque eso no es raro en mi xd). Nada puede arruinar la magia de la lluvia, ya que aunque sea que este en la playa deseando sol, si llega la lluvia sería como "doblemente mágico": el mar, gran amor de mi vida, más la lluvia. 

Ahora, me gustaría estar abajo, saltando, gritando, girando, cantando bajo aquel increíble fenómeno meteorológico, que aunque solo sea parte de uno de los tantos ciclos de este mundo, es para mi algo mucho más especial, hasta creo que uno de los mejores besos de mi vida, fue bajo la lluvia, solo porque ella le dio ese toque. 

Es extraño, ya que la mayoría de las veces la gente asocia la lluvia con algo malo, con la tristeza, con la pena, pero para mi es una mezcla de todo: es vida, es alegría, es tristeza.










El día que muera, espero que este lloviendo :).